Ser humano no es una tarea fácil. ¿La parte más complicada? Las emociones. Nuestro sufrimiento tiene que ver con las emociones.
Obviamente hay emociones que nos agradan, que se sienten muy bien y que deseamos que sean más frecuentes, pero tenemos muchas más emociones que no se sienten muy agradables. Dichas emociones tienen que existir para que podamos darnos cuenta de que hay algo importante que hemos perdido, que hay algo que nos duele, que hay alguna necesidad frustrada o insatisfecha. Las emociones muchas veces son dolorosas pero necesarias. Debido a nuestra incomprensión, son a menudo evitadas, suprimidas y escondidas, ahí reside el principal problema, el no recibir ni escuchar su mensaje.
Las emociones nos acompañan a lo largo de la vida y sorprendentemente entendemos muy poco de ellas. Personalmente, me ha tocado aprender muchísimo al respecto, muy probablemente de manera tardía, como cuando pasas una materia en extraordinario. Aprendiendo después de haber sufrido bastante, pero a fin de cuentas pasando la materia.
La educación emocional continúa siendo bastante escasa en nuestra cultura, en nuestras familias, en nuestras escuelas. Pero es una materia que no podemos exentar, debemos cursarla y aprender tarde o temprano.
Es por esto que quiero compartirte estos 10 puntos clave sobre las emociones:
- Todos sentimos emociones, las mismas emociones, todas las emociones. Claro que existen diferencias entre familias, entre culturas y entre personas, pero todos tenemos la capacidad de experimentarlas. La diferencia más grande reside en cómo experimentamos las emociones y cómo las manejamos.
- Las emociones son temporales. Se trata de experiencias transitorias, con un inicio, un clímax y un fin. No existe una emoción que se quede para siempre. Lo que si hacemos muchas veces es prolongarlas y volverlas a traer con nuestros pensamientos y acciones.
- Las emociones simplemente son. No hay emociones buenas ni malas, no hay correctas e incorrectas, no hay positivas y negativas. Solamente hay emociones que experimentamos como agradables y otras como desagradables.
- Las emociones no son problemas a resolver, son experiencias a ser vividas.
- Las emociones son pedazos de información, son mensajeras, traen un aviso. La emoción siempre tiene una razón de ser; es el mensaje el que debe ser evaluado como un mensaje útil o como una falsa alarma.
- Resistir y rechazar una emoción sólo aumentará el sufrimiento. Si se bloquea u oculta una emoción esta se va a intensificar o va a generar una emoción secundaria dolorosa. Lo mejor que podemos hacer es aprender a convivir con nuestras emociones, aprender a regularlas.
- No hay emociones peligrosas. El peligro reside en cómo las evaluamos y juzgamos, el peligro está en las acciones que emprendemos y en las que dejamos de hacer.
- Las emociones tratan de ayudar. No confundamos emociones con pensamientos, son los pensamientos los que nos dicen: “eres un bueno para nada” “te van a rechazar” “eres un desastre”.
- La emoción es una respuesta automática, no elegimos sentirla. No juzgues la emoción ni te juzgues por tenerla. Separa la emoción de la acción, la emoción no se juzga ni evalúa, tus acciones si se pueden juzgar y evaluar.
- Las emociones son una parte de nuestra experiencia, no son la totalidad de quienes somos. Recuerda: “No soy la emoción, tengo una emoción.”
Estas claves no son absolutas, sino que son algunas aproximaciones para ayudarnos a entender mejor las emociones basadas en lo que he aprendido. Espero que ayuden a tu educación emocional y que promuevan un mayor bienestar en tu vida, comparte y comenta: ¿qué otras claves de las emociones conoces o has descubierto?
¿Quieres saber acerca de la clave para sufrir menos? lee aquí.